Jóvenes estrellas.

Oscar dos Santos.
Hoy analizaremos a una de las perlas del fútbol brasileño, Oscar, nacido en Americana, Sao Paulo, en 1991.

Oscar juega como mediocampista central y milita actualmente en el Chelsea FC tras ficharlo en el actual período veraniego de traspasos por 32 millones de euros.
Es un jugador que se dio más a conocer este verano a raíz de su participación en los Juegos Olímpicos de Londres, jugando como pieza clave en el Brasil de Mano Menezes. A pesar de no lograr el título como se preveía, consiguió su primera medalla olímpica, que fue de plata. Sin embargo todos aquellos más interesados ya se habrán fijado en él durante su gran actuación en el Mundial sub20 celebrado el pasado año en Colombia o en el Campeonato Sudamericano sub20 de Perú, donde Brasil consiguió alzarse con la victoria en ambas citas, con un Oscar brillante y fundamental en el eje central del mecanismo brasileño, apuntando ya maneras para consagrarse como un gran futbolista, siendo cada vez más relevante en el juego de las categorías inferiores de la Canarinha, llegando incluso a debutar con el máximo equipo en 2011 y siendo un jugador más fijo en la selección absoluta en este año 2012, siendo en esta temporada que arranca con su salto al fútbol europeo, una de las más prometedoras, en la que se espera que logre explotar y desarrollar todo el potencial que posee esta joven estrella de aquí a unos pocos años.
Esta temporada ha sido el nuevo Chelsea de Roberto Di Matteo el que le ha dado la oportunidad de probarse en el fútbol europeo, en un equipo de Champions, siendo su vigente campeón, y que aspira a luchar contra los dos de Manchester por la Premier League, que está apostando por jóvenes promesas como este técnico centrocampista brasileño, puede ser el trampolín de Oscar si aprovecha sus oportunidades, pudiendo llegar a disfrutar de bastantes minutos, ya que el Chelsea está carente de jugadores como él en el centro de la medular.
Analizando más el juego personal de Oscar, destaca como un centrocampista central de toque, con una característica muy brasileira, la técnica, que aprovecha para enlazar jugadas desde atrás y llegar rápidamente al área rival, dejando atrás las ayudas defensivas del oponente y abriendo espacios en la zaga rival, haciendo que sus llegadas desde atrás sean muy peligrosas. No es un centrocampista defensivo, pero ayuda eficazmente a su equipo sí se quiere mantener el resultado aguantando la pelota, ya que sí las entradas o el robo de balón no son sus puntos más fuertes, aunque sí lo es su sangre fría y su talento y clase para distribuir y mantener la pelota en sus pies, ofreciéndose constantemente a sus compañeros, facilitando la salida de balón y fomentando el buen juego de toque, consiguiendo hacer que el equipo en el que juegue logre ofrecer un fútbol muy vistoso y alegre. Se trata por tanto de un centrocampista que da juego al equipo, sabe qué hacer con la pelota en todo momento y es un jugador muy presente a lo largo de todo el partido, destacando más en el plano ofensivo dando mucha movilidad a la pelota y consiguiendo crear peligro con sus llegadas desde atrás. Esto hace que las características más destacadas de este jugador sean su llegada, su técnica y su regate, su serenidad y sobre todo su distribución o creatividad. Atributos que hacen del de Americana un jugador muy importante en su rol en cualquier equipo y que mejora notablemente su juego. Aún es muy joven, tan sólo 20 años, pero si va adquiriendo experiencia y depurando sus principales características se convertirá, fácilmente, en un referente en el centro del campo del fútbol europeo y mundial, por lo que está claro que Oscar, hoy por hoy, es una joven estrella. 

PSG, el nuevo grande del fútbol mundial.

(Para ver el resto de análisis de equipos visita:  http://www.la-cruceta.blogspot.com.es/p/analisis-de-equipos.html  )

El nuevo proyecto del París Saint Germain, cimentado sobre los millones del fondo de inversión qatarí Qatar Investment Authority, ha llevado a la capital francesa a jugadores tan importantes como Ibrahimovic o Thiago Silva. Carlo Ancelotti comandará una nave que ha empezado con bastantes dudas, debido a los dos empates cosechados en las dos primeras jornadas de la Ligue 1, ante rivales mucho menores como Lorient y Ajaccio. Y es que se suele decir que el dinero no da la felicidad, como pudo comprobar el cuadro capitalino la pasada temporada, en la cual quedó por detrás del sorprendente Montpellier en su lucha por volver a reinar en el país galo, cosa que no hace desde 1994.

Fichajes.

Sin duda, el PSG ha dado un salto de calidad mayúsculo en este verano, y ha mejorado una plantilla que ya poseía jugadores de gran nivel. Sin lugar a dudas, su fichaje estrella ha sido el del sueco Zlatan Ibrahimovic, que aceptó, junto con su compañero milanista, Thiago Silva, desembarcar en una liga de un nivel inferior, a cambio de un gran salario, y un proyecto apetecible, con el punto de mira en la conquista de la Champions League. Tanto Ibra como Thiago se postulan como los dos grandes referentes del equipo. Zlatan aportará la magia, la clase, el gol, mientras que el defensa brasileño será un seguro de vida para una defensa que ha comenzado bastante insegura.

Destacada también ha sido la llegada del delantero argentino Ezequiel Lavezzi que, tras varias grandes temporadas en el Napoli, llega a París para inyectar en el equipo su velocidad, desborde e insaciable trabajo, que tendrá en vilo a todas las defensas que se crucen en su camino. Por otro lado, y como apuesta de futuro, llegan dos jóvenes jugadores de gran calidad y que pueden aportar mucho, como Marco Verratti (19), y la perla brasileña, Lucas Moura (20). El primero de ellos, desconocido para el gran público, viene del Pescara, recién ascendido a la Serie A, equipo en el cual debutó a los 16 años y con el que firmó dos últimos años espectaculares, llegando a ser incluso preseleccionado por Cesare Prandelli para la pasada Eurocopa. Estamos ante un mediocentro de gran técnica y visión de juego, con gran salida de balón, algo de lo que el PSG adolece, y que puede ser el hombre por el cual pase todo el juego de los parisinos. Lucas es una de las mejores promesas del fútbol mundial, un jugador ágil y veloz, con un gran uno contra uno, (http://www.la-cruceta.blogspot.com.es/2012/01/jovenes-estrellas_26.html).

Estos nombres se unirán a otros como los de Pastore, Menez o Thiago Motta, lo que conjugará una plantilla de gran nivel, quizás la mejor plantilla de la historia en la liga francesa.

Análisis táctico.

Carlo Ancelotti, en las dos primeras jornadas del campeonato, ha optado por un sistema 1-4-3-3, con dos laterales bastante ofensivos, aunque ha ido introduciendo variantes debido a las bajas del equipo. En el primer partido, frente al Lorient, pudimos ver la importancia capital que tendrá Ibrahimovic en el funcionamiento del equipo. Ante la mala salida de balón, el sueco fue el foco en el que apoyarse para la combinación y la llegada al área rival, un recurso para hacer más fácil la salida de la presión del equipo contrario, aunque se mostró más como una opción de emergencia y poco trabajada a un automatismo. Seguro que Carlo tomó buena nota de este apunte, y este aspecto se convertirá en una de las señas de identidad del equipo.

Una de las cuestiones que más tienen que preocupar al técnico italiano es la atropellada y dificultosa salida del balón desde la defensa. Para facilitar esa salida de balón, Ancelotti deberá trabajar otro tipo de estrategias para conseguir que el juego del PSG mejore. Estamos viendo en estos últimos tiempos cómo prácticamente la mayoría de los equipos optan por adelantar la linea de los laterales en salida del balón, dejando la responsabilidad del juego al los dos centrales y el mediocentro correspondiente, con el apoyo de los interiores. Con la llegada de Thiago Silva y el trabajo de Ancelotti, el equipo debe mejorar. Verratti es un mediocentro que puede aportar mucho en este aspecto, ya que, como se demostró el el partido del Ajaccio, Matuidi no cumple este función con demasiada eficacia. Una de las claves será ver qué tipo de mediocentro elige el entrenador transalpino. Matuidi no está preparado para ser titular. Otra de las cosas a mejorar es la ocupación de espacios en el terreno de juego. Pese a la clara vocación ofensiva de los laterales Jallet y Maxwell, apenas se han visto acciones de dos contra uno con los defensores del equipo contrario. Tanto Lavezzi como Menez han estado desubicados en el terreno de juego, y no han tenido demasiado éxito cuando se han internado en jugadas individuales. Parece obvio pensar que con el tiempo los automatismos irán haciendo que el juego del equipo mejore, así como la forma de jugadores clave que de momento no han empezado del todo bien la temporada. Clave será el papel de Zlatan, y el modo en el cual les puedan llegar buenos balones a los jugadores desequilibrantes del equipo.
Ancelotti parece tener 14 o 15 jugadores de máxima confianza, lo que puede ser un problema a largo plazo. Uno de los puestos con mayores problemas es el del delantero centro. Sin Ibra, Gameiro y Hoarau no parecen tener el nivel necesario como para competir de verdad en Europa, y en el partido ante el Ajaccio, pudimos ver como Ancelotti, por la ausencia de Ibra, jugó con Nené en punta, acentuando los problemas comentados con anterioridad.

Defensivamente, se nota la falta de compenetración. También es presumible pensar que mejorará con el tiempo, y Thiago Silva aportará mucha seguridad y tapará los posibles agujeros que puedan surgir a lo largo de los partidos. El equipo sufre mucho en la zona exterior y realiza una presión a partir de campo propio sin demasiada intensidad. Sin duda, una de las claves de los equipos modernos es realizar unas transiciones ataque-defensa rápidas, y este es un aspecto que al PSG le cuesta, como pudimos ver cuando el Lorient se puso 0-2 en el Parque de los Príncipes.

Aún así, equipo e individualidades hay de sobra como para ganar la Ligue 1 de forma más o menos cómoda. Otra cuestión será poder reinar en Europa, para lo cual le falta profundidad de banquillo, un organizador de juego que asuma el peso del equipo, y dos verdaderos nueves de grantías, supondrán unas dificultades tal que harán que el PSG tenga que mejorar más su plantilla en los próximos años para poder acercarse a su objetivo europeo. Si los resultados van acompañando, podrán disputar la carrera por el cetro europeo en un futuro no muy lejano, aunque todo esto son especulaciones. Si bien es cierto que apuntábamos que el dinero no da la felicidad, ayuda, y en el mundo del fútbol, más todavía, donde únicamente tres o cuatro equipos hoy en día pueden realizar desembolsos millonarios en busca de sus objetivos. Y el París Saint Germain es uno de ellos.

@CarlosGarcia09