CAN 2012: Zambia hace historia y se corona como reina de África.

Muchas veces intentamos buscar la lógica en situaciones que carecen de ella. Explicar lo que ha sucedido en esta apasionante edición de la Copa de África es una de esas situaciones. Zambia, contra todo pronóstico, se ha proclamado campeona del torneo, en una de las mayores sorpresas de los últimos años en el fútbol mundial.

El triunfo de la selección del sur de África representa una de las mayores gestas futbolísticas de todos los tiempos. "Los chipolopolo" han logrado llevar la alegría a uno de los países más devastados por el hambre y la pobreza. Además, para añadirle un punto más de emotividad, el combinado entrenado por Hervé Renard ha ganado la que es su primera Copa de África de la historia a escasos 300 metros de la costa en la cual, en 1993, el avión que transportaba a la selección zambiana se estrellaba, sin dejar supervivientes. El gran mérito de esta selección reside en su capacidad para ir superando obstáculos y no amedrentarse ante rivales de superior categoría. Zambia, en estos momentos, cuenta con únicamente dos jugadores en el Viejo Continente, su goleador Mayuka, que milita en el Young Boys suizo, y Lungu, que hace lo propio en el Ural ruso, de segunda división. "Los chipolopolo", salvo en la segunda parte de la semifinal contra Ghana, demostraron un juego alegre y sin complejos, con transiciones defensa-ataque muy rápidas, aprovechando la velocidad de sus hombres más adelantados, y combinando muy bien en las inmediaciones del área. Es preciso destacar el gran torneo de jugadores como el ya mencionado Mayuka, con un gran juego de espalda a portería pese a su pequeña estatura, Kalaba y Chris Katongo, (TP Mazembe y Henan, respectivamente), que dotaron al equipo de chispa y desequilibrio en los últimos metros. El gran trabajo del técnico francés Reinard se basó en la apuesta por un fútbol valiente, en el cual el equipo supiese lo que tenía que hacer en cada situación. Dotó al equipo de un sistema defensivo más o menos organizado dentro de lo que es la naturaleza del fútbol africano, y supo hacer que sus jugadores se adaptasen a la forma de jugar del equipo rival sin perder sus señas de identidad.

Breve comentario de la final.

Comentando un poco la final del domingo, Costa de Marfil aparecía como la gran favorita para ganar, estaba ante una ocasión histórica para hacerlo. Pero pronto se pudo ver que "Los Elefantes" se vieron sorprendidos por el descaro y el atrevimiento de Zambia, que rompió los esquemas de todos los expertos y salió a por la posesión, con una fuerte presión sobre el doble pivote marfileño formado por Didier Zokora y Tioté, que tuvieron grandes dificultades para contrarrestar esta situación. Costa de marfil cometió un gran error al situar a Yaya Touré como mediapunta, ya que apenas participó en el juego del equipo, que necesitaba de su presencia unos metros más atrás para poder salir con fluidez de la presión zambiana. Los marfileños, que habían demostrado que podían jugar un buen fútbol tras la semifinal contra Mali, se mostraron incapaces de asegurar la posesión, y sus ataques se sucedían de forma causal, sin criterio ni continuidad. Didier Drogba tuvo la victoria en sus botas, pero el destino quiso que la estrella del Chelsea fallara un penalti que habría significado el segundo título, prácticamente seguro, para su país. Esta tónica se mantuvo a lo largo de los 120 minutos de final, acentuado por la falta de un plan B en ambos equipos, y la sorprendente decisión del seleccionador marfileño de sustituir a Yaya Touré. Y así se llegó a una emocionante y emotiva tanda de penaltis, en la que Sunzu logró batir a Barry y poner patas arriba a todo el mundo del fútbol.

Ghana y Costa de Marfil, las grandes perdedoras.

Los dos equipos más potentes de África demostraron no estar a la altura de las expectativas. Su fútbol fue rácano, especulativo y temeroso, muy lejos de lo que se presumía. Cuentan con jugadores de gran calidad y experiencia en Europa, pero no son capaces de dominar los partidos ni hacer un juego vistoso. Representan la cierta "involución" que ha sufrido el fútbol africano, pues cada vez se opta con más frecuencia por un fútbol más combinativo que físico, tendencia que parecía inversa hace algunos años. Además, ya hemos comentado el decepcionante papel de selecciones como Senegal o Marruecos en otros artículos. Para finalizar, cabe destacar el descaro de las anfitrionas Gabón y Guinea Ecuatorial, que practicaron un fútbol muy parecido al de Zambia, y que merecen ser mencionados. Ha sido una edición muy interesante y llena de sorpresas, que ha demostrado aquello que comentábamos en la previa de que quizás el fútbol africano se ha quedado un poco estancado, fruto del gran rigor táctico que ciertos entrenadores quieren darle a sus equipos, pero que no deja de ser una muestra de miedo y ciertos complejos y que no es tal, pues muchas veces confundimos táctica con defensa, idea que está totalmente equivocada. Por último, os dejamos, de forma esquemática,  nuestro once ideal del torneo.

Barry Copa.
Kily, Kolo Touré, Sunzu, Tamboura.
Juvenal, Yaya Toure, Msakni.
Katongo, Kalaba, Aubagmeyang.

@Carlosgarcia09